Con el eco de voces rancias y vacias
Nada la salva mas que el tibio recuerdo
De un furtivo momento de alegria.
Escasos fueron tus profundos besos
Pero saciada como nunca me sentia
Tenerte enfrente, flaco, alto y atractivo
Jugando a que ya te conocia.
Me alejo ahora de nuestra historieta
Temerosa de perderme en la ironia
De caer de nuevo en ese abismo frio
Que con esfuerzo y mucho tiempo ya cubria.
Leo tus letras y me nace una sonrisa
Dudo de mis pasos, pero no te alejo
Sigo quieta, firme, adormecida
Insegura como siempre, pero como nunca enternecida.
Albergo el deseo que tu seas el de mis suenos
Que resaltes entre todos como esa blanca rosa
Que se posa sola y diferente
Entre el ramo de once bellas rosas rojas.
Si obstinare el destino en enrredarnos
Tratare de rendir mi resistencia
Al misterio limpio del burlon futuro
Viajando de tu mano, sin indiferencia